ENSEÑANZA
No. 116
05-116.01
Sois el pueblo en el cual he puesto una vez más mis complacencias, porque
siempre que el dolor ha sido muy acerbo en vosotros, habéis sabido levantar
vuestros ojos hacia Mí, para llamarme.
05-116.02
Este es tiempo de pruebas, pero mi palabra como bálsamo divino ha venido a
traeros consuelo y esperanza en vuestra tribulación. Mas Yo os pregunto ¿Por
qué os encontráis llorando, hambrientos, enfermos y desnudos? ¿Por qué dormíais?
¿Por qué habíais borrado de vuestro corazón mis palabras de vida, que son el
sustento para el espíritu?
05-116.03
No estabais preparados cuando os sorprendió mi presencia, pero al menos
supisteis sentirme cuando os disteis cuenta de que mi voz os estaba llamando
para haceros una nueva revelación.
05-116.04
Para venir en mi busca, mucho os valió el ser pobres de bienes materiales, pero
no es que voluntariamente hubierais renunciado a ellos para buscar la
espiritualidad, sino que mi caridad os apartó de las riquezas frívolas y
superfluas, para que estuvierais libres cuando Yo llamara a las puertas de
vuestro corazón.
05-116.05
Cuando llegasteis por vez primera a escuchar esta palabra, poco o nada os
interesaba la finalidad espiritual de mi manifestación; lo que vuestro corazón
deseaba y me pedía, sólo eran bienes terrenales, de los cuales os sentíais
muy menesterosos; mas luego os fuisteis dando cuenta de que los dones que venía
derramando vuestro Maestro eran espirituales y llegasteis a comprender que los
bienes de la tierra jamás llegarían a tener el valor de aquellos.
05-116.06
Cuando esa luz brilló en vuestro entendimiento, comprendisteis la miseria de
las grandes naciones, el dolor de los que, siendo ricos y señores en el mundo,
sólo aparentemente lo tienen todo; descubristeis que era falso el esplendor, la
mentira, la grandeza y el placer.
05-116.07
Habéis visto la impotencia de las religiones para unir y regenerar a la
humanidad, y a cada paso habéis sido testigos de su desunión.
05-116.08
Al contemplar tanto desequilibrio y confusión entre los hombres, de vuestro
corazón se ha escapado una acción de gracias hacia el Padre, porque escuchándole
en este tiempo habéis encontrado en su palabra un puerto seguro para vuestro
Espíritu
05-116.09
Mas así como os habéis dado cuenta de todas estas verdades, es preciso que
también os vayáis enterando de la responsabilidad que tenéis ante vuestros,
hermanos, porque debéis de comprender que ¿acaso esta paz que disfrutáis y
esta luz que ilumina vuestra existencia, la he puesto tan sólo para ayudar a
este pueblo? No, multitudes, mis complacencias se han derramado sobre vosotros
tan sólo como una primicia o un anticipo de lo que más tarde daré a la
humanidad. Ved por qué os digo que veléis en espera de los caminantes que
vendrán en busca de sombra y de refugio. ¿No estaría de plácemes vuestro
corazón si los hombres que llegaran de otros pueblos, encontrasen en vuestro
seno un ejemplo de caridad, de espiritualidad y de paz?
05-116.10
Esa será vuestra misión, después de que Yo haya concluido de daros mi lección;
y así con Elías en espíritu fue, mi precursor, este pueblo será mi sucesor.
el que dé con su vida, sus palabras y sus obras, el mejor de los testimonios de
que Yo estuve entre vosotros.
05-116.11
Grande será. vuestra satisfacción cuando sepáis recibir con amor a vuestros
hermanos y darles algo de lo mucho que Yo os he entregado; mas pensad que sería
mayor vuestra pena, cuando la humanidad estuviese llamando a las puertas de
vuestra ciudad, sus moradores estuviesen dormidos o entregados al cumplimiento
de prácticas superfluas.
05-116.12
No estéis absolutamente confiados en vuestras acciones, porque las tentaciones
os acechan y no es difícil que, quien había ya adelantado en el sendero de la
espiritualidad, quisiera volver a los caminos de placer, al Materialismo egoísta,
a la vida vacía por la falta de un ideal verdadero y elevado.
05-116.13
Os digo esto, para que viváis alerta, mas no penséis que mi ley tortura o
esclaviza; cierto es que el paso de la tiniebla a la luz, del mal al bien, de lo
bajo a lo elevado, resulta muchas veces, doloroso para el hombre; mas cuando ya
logra caminar firmemente por mi senda, todo lo que encuentra en su jornada, es
paz, porque para el espíritu, no significa ningún sacrificio la práctica de
la virtud.
05-116.14
¿Quién de vosotros podrá decirme que no le he invitado a caminar por el
sendero de la virtud? Mirad que Yo no vengo a hacer alarde de los beneficios que
os he venido concediendo, pero si os pido que me digáis si no he derramado
prodigios en vosotros y en vuestras familias, si no he sanado a los enfermos sólo
con vuestra oración o vuestras lágrimas, si no os he librado de la muerte
cuando ya os encontrabais al borde del abismo. ¿Cómo había de dejar de hacer esto
con vosotros, si sé que vais a necesitar de mucha fe y fortaleza para
transitar por mi camino?
05-116.15
Os he traído mi luz para que gocéis en su contemplación; no lo he hecho para
herir vuestros ojos, ni para cegar a vuestro espíritu.
05-116.16
Tomad con serenidad y calma el camino para que no os parezca ni más corto de lo
que en realidad es, ni tampoco demasiado largo. Vosotros debéis pensar tan sólo
en que para alcanzar la paz en la eternidad de la que formáis parte por el espíritu,
las pruebas en la vida son el camino; id por él en paz, con verdadero ideal de
perfeccionamiento y nunca llegaréis a sentirlo pesado ni escabroso; será para
vosotros como uno de esos viajes en los que se contempla un bello camino, un
paisaje grato y el que quisierais que nunca terminara.
05-116.17
Si os lo hubiese dado todo en esta vida, ya no estaríais deseando ascender un
peldaño más, pero lo que no habéis alcanzado en una existencia, lo buscáis
en la otra, y lo que no alcanzáis en aquella, os lo está prometiendo otra más
elevada, y así sucesivamente hasta el infinito, en el camino sin fin de los espíritus.
05-116.18
Cuando escucháis mi palabra, os parece imposible que vuestro espíritu vaya a
ser capaz de alcanzar tanta perfección, y Yo os digo, que hoy ponéis en duda
el alto destino del espíritu, porque sólo miráis lo que alcanzáis a ver con
vuestros ojos materiales, pequeñez, ignorancia, maldad, pero eso se debe a que
el espíritu en unos está enfermo, en otros se encuentra paralítico, hay
quienes son ciegos y quienes van muertos espiritualmente. Y ante tanta miseria
espiritual tenéis que dudar del destino que la eternidad os tiene reservado. Y
así vivís en este tiempo de amor al mundo y de materialismo; mas ya la luz de
mi verdad ha llegado hasta vosotros disipando las tinieblas de la noche de un
tiempo que ya pasó y anunciando con su aurora la llegada de una era en la que
el espíritu recibirá la iluminación de mi enseñanza.
05-116.19
Esta luz os librará de la ignorancia, de la mentira; bajo su claridad, cuánta
falsedad, cuánto adulterio e impostura quedarán al descubierto. iAy de los que
han adulterado la ley! ¡Ay de los que han ocultado o falseado la verdad¡ No se
imaginan cómo será su juicio.
05-116.20
Mi palabra exhorta al mundo a la meditación, para que de ella pueda nacer el
arrepentimiento y de éste la regeneración; pero así como la palabra a través
de estos portavoces os despierta y estremece, también en otras tierras, en
otras comarcas, por otros caminos, se han levantado enviados míos a amonestar
al pueblo, a recordarle la pureza de mi ley y la verdad de mi doctrina. Ellos se
han preparado bajo la luz de mi inspiración y aunque van soportando burlas y
desprecios, siguen paso a paso en el cumplimiento de su misión. Yo os digo que
a ellos les reservo su galardón, y llegará el instante en que también
conozcan lo que ahora vosotros estáis recibiendo.
05-116.21
No todos los que andan por calles y caminos, hablando de los acontecimientos de
los tiempos pasados, interpretando profecías o explicando revelaciones, son mis
enviados, porque muchos por vanidad, por despecho o por intereses humanos, han
tomado aquellas enseñanzas para ofender y juzgar, para humillar o herir y aun
para matar.
05-116.22
Necesario es que esta luz que tan dulcemente ha llegado hasta vuestro corazón,
se extienda de un punto al otro del orbe para que los hombres se acuerden de que
Cristo no hiere, ni humilla y menos entrega muerte; porque El es la vida, el
pan, la salud, el consuelo, y de todo esto hoy se encuentra menesterosa la
humanidad.
05-116.23
Pueblo, he conversado con vosotros, pensad en mis palabras, juzgaos a través de
ellas, mirad con esta luz que os doy, la vida y cuanto os rodea; para que cuando
volváis a escucharme una vez más, es encuentre mas conscientes y mejor
preparados para el desempeño de vuestra misión.
05-116.24
Os he hablado por medio de símbolos a través de los tiempos, mas ahora estáis
a la entrada de uno nuevo en que os hablaré en forma clara, porque ya podéis
entenderme.
05-116.25
Todo en la creación os habla de Dios y de la vida eterna, todo cuanto os rodea
y acontece en la vida, es como una imagen de lo espiritual; mas no os habéis conformado con las obras que he creado y a través de las cuales os hablo, os
revelo y os enseño. Cada pueblo, cada religión o secta, crea imágenes, símbolos,
formas y figuras, para la representación de lo divino. Lo habéis creído
necesario y Yo os lo he permitido, oh humanidad; mas ahora que vuestro espíritu
está más iluminado, más desarrollado que en los tiempos anteriores, puede
mirar la vida y entenderla con claridad. Yo les enviaré a todos este mensaje,
para que despierten a la luz y puedan contemplar de frente la verdad.
05-116.26
Los dones del espíritu, marchitos por el abandono en que el hombre los ha
tenido, sentirán descender el rocío de mi caridad, y cuando nuevamente la
humanidad eleve con pureza sus pensamientos hacia Mí, podrá contemplar lo que
antes no había visto; escuchará la voz del Padre hablándole en muchas formas
y sentirá su presencia a cada paso.
05-116.27
Entonces, dejarán de crear símbolos y formas, porque al mirar la faz radiante
de su Padre en toda la creación, dejarán de sentir la necesidad de esos
objetos, a los cuales dotan de virtudes para creer en ellos como si fueran la imagen
del Padre.
05-116.28
A vosotros, discípulos, que habéis escuchado esta palabra en mis lecciones, os
pregunto: ¿Por qué mirándome, oyéndome y sintiéndome, habéis creído tener
la necesidad de crear símbolos para vuestro culto?
05-116.29
Si a estas preguntas contestáis que sólo estáis respetando lo que los
primeros os legaron, Yo os digo que ellos, sorprendidos por la luz de mi
revelación, con símbolos concibieron lo que es la espiritualidad.
05-116.30
Este pueblo, tiene una gran misión espiritual que cumplir en medio de esta
humanidad amenazada por el materialismo más absoluto, el cual crece y avanza
como un nuevo paganismo, como un nuevo y más grande culto a la materia, al
mundo y a sus pasiones.
05-116.31
Y ante esa prueba, ¿aún queréis seguir conservando reminiscencias de cultos
idólatras? ¿Es ése el ejemplo de espiritualidad que vais a dar, y ésas son
las armas que estáis preparando para luchar?
05-116.32
Dejad que mi palabra germine en vuestro corazón, para que pronto podáis
levantamos a testificar con vuestras obras mi doctrina.
05-116.33
Cuando deje de comunicarme con vosotros, porque esta etapa haya llegado a su
fin, no vayáis a desviaras del camino, no dejéis de buscarme en vuestras
tribulaciones, seguid confiando en mi enseñanza.
05-116.34
Yo soy la puerta estrecha por donde debéis pasar y María la escala por la que
ascenderéis, amando y obedeciendo a vuestra Madre. Creyendo y respetándome, no
encontraréis tropiezos y acortaréis el camino.
05-116.35
Estáis en el tiempo de la lucha del bien contra el mal; vosotros habéis sido
llamados a colaborar Conmigo en esa batalla que ya ha dado principio. Yo he
venido a enseñaros cómo debéis luchar para disipar las tinieblas y hacer luz
en todo espíritu. Mi palabra os ha guiado, para que viváis velando y orando,
para que no os dejéis seducir por falsas luces, ni deis vida a voces engañosas.
05-116.36
Cuando haya pasado este tiempo y veáis mi comunicación muy lejana, y vosotros
en cumplimiento a mis mandatos transmitáis a vuestros descendientes esta buena
nueva, suspiraréis por estos tiempos y os sentiréis dichoso de haber sido
escogidos para presenciar mi manifestación divina; mas ya para esos tiempos
habrá desaparecido todo lo que de impuro habéis mezclado a esta doctrina y mi
palabra surgirá de vuestro espíritu diáfana y pura, revelando sólo la luz y
la verdad.
05-116.37
Cuando seáis interrogados por vuestros hermanos, hablad sin callar nada de lo
que mi obra encierra y recordad ante ellos al Maestro en cada una de sus
lecciones.
05-116.38
Os hago responsables de las generaciones que, nacidas de vosotros, han de venir;
pensad que mi palabra de este tiempo no ha sido dada para unas cuantas
generaciones, sino para todas las que han de sucederos, y que ellas han de
prepararse con mayor espiritualidad, para alcanzar la cima que Yo he señalado
como meta al hombre.
05-116.39
Bendigo a los que siguen el camino ascendente y que a medida que el tiempo pasa,
alcanzan mayor elevación en el estudio de mi palabra y se disponen a oír mi
voz en su espíritu, cuando este tiempo de mi comunicación por medio del
entendimiento del hombre haya pasado. Bienaventurados los que den crédito a mi
obra y sepan honrarla con su espiritualidad.
05-116.40
¡A cuántos de vuestros hermanos podéis salvar con vuestra oración! Este
mundo está al borde de un abismo y Yo os envío a él para que evitéis su
calda. Detened a la juventud en su carrera hacia la destrucción de su moral;
ilustrad su espíritu para que ponga las bases a una vida recta y elevada.
05-116.41
Cruzad los caminos del mundo llevando como norma de vuestra vida la verdad de
mis enseñanzas; mas respetad la tierra que pisáis, y esos senderos transitados
por vosotros quedarán preparados y habrá alianza entre las naciones y haréis
de esta tierra un hogar en el que todos sintáis el calor de vuestro Padre
Celestial y os reconozcáis como hermanos unos a otros.
05-116.42
He sufrido al contemplar la ingratitud de mis criaturas, y si ellas me han
desconocido como Padre, Yo nunca he negado que sois mis hijos, aunque algunos se
encuentren manchados. He contemplado a grandes naciones alejadas de Mí,
entregadas tan sólo a su vida material, a sus problemas, sin esperar nada de Mí.
Mas pronto llegará el tiempo del despertar, y desde los niños hasta los
ancianos, ocuparán su vida en el estudio y práctica de mi enseñanza. Los
ancianos hablarán con dulzura y guiarán con la luz de su experiencia. Los niños
sorprenderán al mundo con el desarrollo de sus dones y con su consagración a
mi obra.
05-116.43
Hoy, pueblo amado, extraed de mi doctrina la más elevada moral para vuestra
vida. Si anheláis que el mundo crea en esta revelación, dad con vuestra vida
el mayor testimonio de mi verdad. Os he dicho, que vosotros debéis ser los
espejos limpios, el pueblo que sepa dar ejemplo de fe, obediencia y Limpidez.
05-116.44
Haced que entre vosotros tome fuerza la pureza y el bien, y con esto iréis
corrigiendo a los que sin llevar sanas intenciones han penetrado entre vuestras
filas.
05-116.45
Los que habéis llegado a concebir la verdad y la perfección de mi doctrina,
tenéis el deber de contrarrestar con vuestras buenas obras todo el mal que
causan a esta obra aquellos que no han comprendido su finalidad.
05-116.46
Ved cómo la mala simiente se ha multiplicado entre vosotros, hasta casi ocultar
la verdadera semilla. La mentira, la superstición, la hipocresía, el lucro,
las malas influencias, el fanatismo y todas las impurezas, han sido la mala
hierba que ha cundido entre este pueblo al cual quisiera ver libre de toda
lacra, para enviarle como emisario mío a otros pueblos y naciones.
05-116.47
Esta labor de depuración la confío a quienes amen lo verdadero, lo limpio; es
una obra de gran paciencia; mas, cuan grande será la dicha de este pueblo,
cuando vea que su luz por fin ha disipado las tinieblas. Entonces será cuando
os considere como emisarios de esta buena nueva y os envíe al mundo a luchar
contra el imperio del mal, contrarrestando su fuerza con la regeneración de
vuestros hermanos.
05-116.48
Mirad con cuánto amor y con qué divina paciencia he venido a enseñar y a
corregir, diciéndoos que me dejéis ser quien os señale vuestros errores y
defectos y quien os lleve a la perfección, pero ¡ay, cuántos son los que
permanecen sordos a estas palabras, y en su indolencia, en la dureza de su corazón.
dejan pasar instantes preciosos de preparación, sin querer creer en las pruebas
que se acercan!
05-116.49
Un día el mundo se propondrá juzgar y escudriñar a este pueblo, y sólo el
que haya velado logrará salir avante; mas el que haya tomado mi obra para fines
egoístas e insanos, ése sentirá sobre sí la justicia de la tierra, y
entonces tardíamente lamentará haber querido crearse su propio reino, su trono
de adulaciones y comodidades dentro de mi propia obra espiritual, que es camino
de amor, de humildad y de renunciación.
05-116.50
Os digo a todos una vez más, velad y orad, y si en verdad creéis en mi
palabra, no dejéis para mañana el cumplir con ella, porque mañana podría ser
tarde.
05-116.51
Ved, pueblo, que ya resulta pequeña la tierra para contener tanto dolor humano.
Ayer le parecía al hombre un valle sin fin este planeta, ahora lo ha
conquistado y lo ha poblado.
05-116.52
Yo di al hombre por morada este mundo diciéndole: "Creced y multiplicaos y
henchid la tierra", y en verdad que ha henchido la tierra, mas lo ha hecho
con el pecado y el dolor.
05-116.53
Este mundo, que debiera ser el hogar de una sola familia que abarcara a toda la
humanidad, es manzana de discordia y motivo de absurdas ambiciones, traiciones y
guerra. Esta vida que debería ser aprovechada para el estudio, la meditación y
el esfuerzo por alcanzar la vida eterna, aprovechando las pruebas y las
lecciones en beneficio del espíritu, es erróneamente interpretada por la
humanidad, dejando que su corazón se envenene con la rebeldía, la amargura, el
materialismo y la inconformidad.
05-116.54
Los hombres olvidan el idioma con el que les habla la conciencia, pierden la fe
y dejan apagar los dones de su espíritu para entregarse unos al materialismo,
otros a renegar en contra de esta existencia, pretextando un anhelo infinito de
huir de este mundo para pasar a otra vida.
05-116.55
A éstos les pregunto: ¿Tenéis ya la espiritualidad necesaria para habitar
mundos mejores? ¿No pensáis que si no estáis preparados, aunque pudierais
penetrar en la mejor de las moradas espirituales, no podríais estimar el valor
de aquella vida, ni gozar ampliamente de su paz?
05-116.56
En verdad os digo, el mérito de esta vida que hoy tenéis, está en saber
sobreponer el espíritu a todas las vicisitudes y miserias imperantes; y no es eso
todo, sino que a más de estar conformes, logréis experimentar en vuestro
espíritu el gozo que proviene de ser útiles a vuestros hermanos en un mundo
donde existe tanta necesidad.
05-116.57
El día en que el espíritu haya alcanzado la perfección que le es necesaria
para sentirse en mi gloria, no le importará el sitio o mundo en que habite, o
si está encarnado o desencarnado; llevará en sí el reino de los cielos y sabrá
disfrutar de su gracia en todas y en cada una de las misiones que su Padre le
envíe a cumplir.
05-116.58
Meditad en esto, y por ahora mirad que este valle es una extensa tierra,
propicia para que en ella hagáis los méritos necesarios para conquistar esas
moradas a las que aspira vuestro espíritu.
¡MI
PAZ SEA CON VOSOTROS!